9 maneras en que las personas se hacen las víctimas (+ cómo lidiar con ellas)

¿Alguna vez te has encontrado con alguien que siempre se presenta como víctima? Estas personas a menudo se sienten incomprendidas o maltratadas por los demás, y pueden ser difíciles de tratar o trabajar con ellas. En este artículo, vamos a explorar nueve formas en que las personas se hacen las víctimas, y también te daremos algunos consejos prácticos sobre cómo lidiar con ellas. Si estás buscando información útil para mejorar tus relaciones interpersonales, ¡sigue leyendo!

Si ha aterrizado en esta página, probablemente esté más que un poco harto. Hay alguien en tu vida que constantemente se hace la víctima y tu paciencia comienza a agotarse.

Jugar a la víctima es una táctica que mucha gente usa, consciente o inconscientemente. A menudo, lo hacen porque creen que pintarse a sí mismos como la parte perjudicada podría beneficiarlos en una determinada situación o en la vida en general.

Básicamente se trata de nunca aceptar la responsabilidad de sus acciones, culpar a los demás por las cosas que salen mal y quejarse de que siempre son ellos los que sufren, incluso cuando eso no podría estar más lejos de la verdad.

Todos jugamos a la víctima de vez en cuando, es parte de la naturaleza humana. Muy pocos de nosotros tenemos la fuerza mental para aceptar la responsabilidad de nuestros errores cada vez que los cometemos, y eso está bien siempre que no se convierta en un patrón.

Pero si estás leyendo esto, probablemente hayas estado en el extremo receptor de este comportamiento repetidamente.

Puede ser frustrante y también un poco confuso tratar con alguien cuyo modo predeterminado es la víctima.

¿Cómo sabes si alguien está jugando la carta de la víctima deliberadamente y cómo diablos lo enfrentas, ya sea deliberadamente o inconscientemente?

La gente puede jugar a la víctima en todo tipo de formas diferentes. Sigue leyendo para descubrir cuáles son y ver si alguno de ellos te suena familiar.

Luego, veremos cómo puede lidiar con este comportamiento si se enfrenta a él.

9 maneras en que la gente se hace la víctima

Primero, veamos algunas de las señales más obvias de que a alguien le gusta pintarse a sí mismo como una víctima.

1. No aceptar la responsabilidad.

Esta es una de las principales formas en que los seres humanos tratamos de hacernos pasar por la víctima de una situación, en lugar del responsable.

En lugar de reconocer el papel que han desempeñado en causar un problema, señalan con el dedo a otras personas oa las circunstancias que contribuyen, e ignoran su propia participación.

2. No tomar acción.

Cuando algo sale mal, alguien cuyo modo predeterminado es una mentalidad de víctima no hará nada para tratar de solucionarlo. Se quejan del hecho de que está arruinado, pero se niegan a pensar constructivamente sobre cómo podrían remediarlo.

Se dan por vencidos y se quejan y encontrarán excusas para nunca probar algo a menos que estén 100% seguros de que funcionará.

3. No creer en sí mismos.

Si alguien tiende a jugar a la víctima, entonces tendrá cero confianza en sí mismo.

No tendrán la confianza en sí mismos para llevar a cabo sus ideas o deseos y siempre encontrarán formas de evitar exponerse.

Siempre se las arreglan para posponer las cosas o encontrar una salida, y viven firmemente en su zona de confort, simplemente dejándose llevar. Siempre encuentran una excusa para justificar por qué no tiene sentido perseguir las cosas que quieren.

Luego pasan gran parte de su tiempo quejándose de que nada cambia nunca y nunca pueden seguir adelante con nada.

Cada vez que les sucede algo que justifica su negatividad, se aferran a ello y lo utilizan para alimentar a su crítico interior.

4. No tomar sus propias decisiones.

Una forma clásica de jugar a la víctima es poner el control de su vida firmemente en manos de otra persona.

Se dejan guiar por los demás porque, de esa forma, tienen a quien echarle la culpa si no sale bien.

Esta necesidad de orientación y el deseo de rendirse al juicio de otra persona puede llevarlos a desarrollar relaciones poco saludables y ser pasivos, sin expresar nunca sus deseos o necesidades.

5. No tratarse bien.

La narrativa que alguien así tiene en su cabeza es que no es lo suficientemente bueno, no es lo suficientemente capaz, no es lo suficientemente atractivo…

Y, perversamente, probablemente harán todo lo posible para demostrárselo a sí mismos.

Pueden tender a un comportamiento autodestructivo, con hábitos que dañan su salud o dañan sus relaciones, para tratar de mostrarle al mundo que su amargura está justificada.

6. No perdonar y olvidar.

Alguien que se ve a sí mismo como una víctima luchará por perdonar a las personas que cree que le han hecho mal.

Eso es porque esos errores, reales o percibidos, son excelentes formas de justificar por qué no pueden hacer cambios en su vida o en su actitud.

Les gusta tener cruces para llevar que pueden mostrar a las personas cada vez que se cuestiona su forma de pensar o su enfoque de la vida.

Si alguien les hace daño, no importa lo insignificante que pueda parecer lo que han hecho, se apresuran a sacarlos de su vida, sin segundas oportunidades.

7. No saber escoger sus batallas.

Aquellos que van por la vida con esta mentalidad están constantemente a la defensiva, por lo que es probable que se enojen tanto por algo pequeño como por algo serio.

Siempre se sienten como si estuvieran bajo ataque, por lo que a la primera señal de hostilidad están listos para contrarrestar y, a menudo, se pasan de la raya.

8. No reconocer todo lo que tienen.

Las personas así son ciegas a todos los aspectos positivos de sus vidas.

Se enfocan tanto en lo que falta que no pueden apreciar lo que tienen y les resulta imposible ver los aspectos positivos.

9. No ver lo bueno en los demás.

Así como no pueden ver lo bueno en sí mismos y en su vida, también se apresuran a encontrar fallas en los demás.

Criticarán a otros por pequeñas fallas en un vano intento de sentirse mejor o verse mejor en comparación.

Cómo tratar con alguien que siempre juega la carta de la víctima

¿Algo de esto te suena familiar? Si hay alguien en tu vida que lleva el papel de víctima al siguiente nivel, aquí hay algunas tácticas para lidiar con ellos.

1. Escuche cortésmente, pero no se deje atrapar.

Cuando empiezan a quejarse de esto, aquello o lo otro, no tienes que ser grosero o cortarlos, pero tampoco tienes que dejar que te atraigan.

No se emocione al respecto ni se deje arrastrar a tomar partido. No intentes presentar una solución o ayudarlos a arreglar la situación, ya que de todos modos no te dejarán hacer nada al respecto.

Escuche por una cantidad de tiempo razonable, pero no permita que le molesten todo el día, incluso si se siente incómodo al poner excusas para alejarse de su compañía.

Diles que lamentas saber de su situación, pero que tienes algo con lo que empezar o, si no puedes escapar físicamente, cambia de tema.

En realidad, les estás haciendo un favor, ya que insistir en su problema claramente no lo solucionará.

2. No los llame directamente.

Probablemente haya deducido de todo lo anterior que a las personas así no les va muy bien con la confrontación o la crítica, por lo que decirles directamente que deben dejar de jugar a la víctima no lo llevará a ninguna parte.

Es posible que lo ignoren, pero siempre vale la pena guiarlos para que piensen en soluciones a sus problemas por sí mismos.

Ofrecer soluciones usted mismo probablemente será rechazado, pero si sugiere que piensen en soluciones, es posible que pueda romper su círculo vicioso de pensamiento.

3. Prioriza tu propio bienestar mental.

Estar constantemente cerca de alguien así es realmente difícil. Es agotador y puede comenzar a afectar su salud mental.

Tarde o temprano, vas a necesitar un descanso. Si se trata de alguien con quien trabaja, es posible que pueda hablar con su gerente y ver si hay alguna forma de que pueda ser reorganizado.

Si se trata de una relación personal, es posible que tengas que poner límites a la cantidad de tiempo que pasas con ellos, o incluso hacerles saber que necesitas tomarte un descanso.

Darse cuenta de que su comportamiento está dañando su relación podría ser suficiente para sacarlos de su mentalidad.

4. Di adiós.

Si tomarse un descanso de esta persona no fue suficiente para que se dé cuenta de que necesita hacer un cambio, entonces podría significar el final de su relación.

Después de todo, es probable que no solo se quejen de otras personas. Probablemente también te culpen a ti por las cosas, lo que significa que terminas pasando todo el tiempo disculpándote y sintiéndote culpable, sin importar quién tenga la culpa.

Si llega un punto en el que te das cuenta de que la relación solo te está haciendo daño a ti y que no va a cambiar, debes ponerte a ti primero y dejarlos ir, sin importar lo difícil que sea.

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9 Maneras en que las personas se hacen las víctimas (+ Cómo lidiar con ellas)

1. El victimismo individual

Las personas que se hacen las víctimas a menudo tienen la mentalidad de «pobre de mí». Creen que nada les sale bien y que el mundo está en su contra. Es fácil caer en esta mentalidad, pero es importante no fomentarla.

Cómo lidiar con el victimismo individual

  1. Muestra compasión, pero no alimentes su comportamiento de víctima.
  2. Encourage action instead of complaints.
  3. Evite ser arrastrado por su negatividad y mantén una perspectiva realista.

2. El manipulador emocional

Las personas que se hacen las víctimas a menudo manipulan a quienes los rodean al hacerlos sentir culpables o responsables de su infelicidad. Este tipo de manipulación es a menudo sutil, pero puede ser muy efectivo.

Cómo lidiar con el manipulador emocional

  1. Reconoce su comportamiento y no justifiques sus acciones manipuladoras.
  2. Expresa tus preocupaciones y reconoce tus propios límites cuando se trata de su comportamiento.
  3. Mantén tus límites y no te sientas culpable por no complacerlos.

3. El justificador compulsivo

Las personas que se hacen las víctimas a menudo buscan justificar sus acciones y culpas a cualquier costo. Siempre tienen una excusa para todo y rara vez asumen responsabilidad por sus errores.

Cómo lidiar con el justificador compulsivo

  1. Pide explicaciones claras y concretas para sus acciones y decisiones.
  2. Crea un espacio seguro para que puedan hablar sin miedo a ser juzgados.
  3. Fomenta la toma de decisiones y la asunción de responsabilidades.

4. El monopolizador de atención

Las personas que se hacen las víctimas a menudo monopolizan la atención de todos los demás al hablar constantemente de sus problemas, desafíos y dificultades. Pueden absorberte en su drama y exigir toda tu atención.

Cómo lidiar con el monopolizador de atención

  1. Escucha activamente, pero no pierdas de vista tus propias necesidades y emociones.
  2. Marca tus límites y hazles saber cuánto tiempo puedes dedicar a escucharlos.
  3. Recuerda que no eres responsable de solucionar sus problemas.

5. El auto-sabotador

Las personas que se hacen las víctimas a menudo se auto-sabotean al tomar decisiones que no les benefician o hacer cosas que saben que no deberían hacer. Luego se quejan de su propia mala suerte.

Cómo lidiar con el auto-sabotador

  1. Hazles saber que eres consciente de su comportamiento y reconoce cómo les ha perjudicado.
  2. Proporciona apoyo y soluciones, pero no te hagas responsable de sus decisiones.
  3. Fomenta la responsabilidad y la auto-reflexión.

6. El juez

Las personas que se hacen las víctimas son a menudo los «verdugos» de los demás, juzgando y criticando a todos los que les rodean. Buscan imperfecciones y las usan para justificar su propia insatisfacción.

Cómo lidiar con el juez

  1. No caigas en sus tácticas y no tengas miedo de hablar de tus propias necesidades.
  2. Proporciona retroalimentación constructiva si sientes que es seguro hacerlo.
  3. No permitas que te desmoralice o desanime.

7. El pesimista

Las personas que se hacen las víctimas a menudo ven el mundo en una luz negativa y pesimista. Todo les parece mal y creen que nada va a salir bien. A menudo son el «vaso medio vacío».

Cómo lidiar con el pesimista

  1. No caigas en su negatividad y trata de mantenerte positivo.
  2. Proporciona una perspectiva equilibrada y fomenta la perspectiva positiva.
  3. Alienta la toma de decisiones y la acción en lugar de la inactividad debido a su negatividad.

8. La pasiva agresiva

Las personas que se hacen las víctimas a menudo son pasivas-agresivas al mostrar uno u otro comportamiento. Cambian entre ser víctimas y ser agresivas, dependiendo del contexto y las personas involucradas.

Cómo lidiar con la pasiva agresiva

  1. Habla de la situación y siéntete libre de nombrar sus comportamientos pasivo-agresivos.
  2. Continúa siendo abierto y transparente en tus interacciones.
  3. No permitas que su comportamiento afecte tu propia conducta.

9. El perfeccionista

Las personas que se hacen las víctimas a menudo buscan la perfección y se sienten mal por cualquier error cometido. A menudo se enojan consigo mismas y pueden culpar a los demás por lo que ven como fallas.

Cómo lidiar con el perfeccionista

  1. Brinda retroalimentación constructiva de manera sincera y compasiva.
  2. Hazle saber que los errores son normales y muestra apoyo y paciencia.
  3. Fomenta la toma de decisiones y la acción en lugar de la inactividad debido a su perfeccionismo.

Hay muchas maneras en que las personas pueden adoptar la mentalidad de la víctima. Sin embargo, al reconocer estos comportamientos y establecer límites claros, podemos ayudar a las personas a superar sus problemas y volver a una mentalidad más positiva.

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